Entrevista con Lucinda Riley sobre
La carta olvidada

1. La carta olvidada podría describirse como un thriller y es, por tanto, muy diferente a sus anteriores novelas. ¿Qué le inspiró para escribirla?
En 2018 celebré mi 25 aniversario como escritora publicada. Como autora, creo que es vital superar tus límites y asumir nuevos retos. Enfrentarte a distintos géneros y explorar nuevas ideas es indispensable para que tus historias no se queden estancadas. Es fácil, y seguro, permanecer en tu pequeño compartimento y contar lo mismo una y otra vez, pero si yo no me siento inspirada y emocionada cuando escribo, ¿cómo puedo esperar que lo estén mis lectores? Al escribir la serie Las Siete Hermanas, he descubierto lo refrescante y terapéutico que me resulta salir de mi «burbuja» de la historia de Pat Salt y trabajar en otros libros independientes. Siempre había querido escribir un thriller. Si no fuera escritora, ¡me habría encantado ser espía en los servicios secretos!

2. Joanna y Zoe son mujeres muy diferentes. ¿Cuáles son las cualidades que las hacen únicas?
Lo que admiro de Joanna es su audacia. Se niega a rendirse, aunque sabe que su vida está en peligro. Me encanta su relación con Simon; tengo un buen amigo que se llama también Simon y es realmente como un hermano mayor para mí. Hemos capeado un montón de temporales juntos, ¡y hemos tenido siete hijos entre los dos! Me identifico con Zoe como esposa y como madre, pero también por sus dificultades para gestionar la fama. En realidad, eso fue lo que me frenó cuando me planteaba seguir con mi carrera como actriz. La devoción por su hijo es la misma que yo siento por los míos.

3. Las motivaciones de Marcus y sus lealtades cambian radicalmente a lo largo de la historia. ¿Disfrutó escribiendo sobre este personaje?
Sí, porque pienso que la mayoría de las mujeres nos hemos enamorado alguna vez de un atractivo embaucador…, ¡a pesar de saber cómo son! Su personaje camina por una fina línea entre el libertino egoísta y el hermano y novio maravilloso, pero a lo largo del libro madura hasta convertirse en un héroe dispuesto a sacrificar su vida por su amada. No me gustan los personajes que son blancos o negros, a menudo las personas hacen cosas que te sorprenden para bien o para mal. Los personajes también deben ser así, y es su amor por Joanna lo que saca a la luz lo mejor de él.

4. La carta olvidada está llena de enrevesados giros de la trama. ¿Cómo consiguió mantener el control de los distintos hilos narrativos mientras escribía?
Como siempre cuando escribo el primer borrador, nunca estoy segura de hacia dónde voy con la historia y de cómo los personajes vienen a mí. Los giros se me ocurrieron mientras escribía. No tomo notas sobre la trama, solo avanzo. Mi objetivo es plasmar siempre ese primer borrador sobre el papel. Cualquier fallo
de la trama lo voy resolviendo en la segunda parte del proceso: la exhaustiva edición del texto. Sin embargo, el epílogo fue literalmente lo último que escribí antes de enviar la novela a mi editor.

5. Irlanda es un escenario fundamental en los momentos dramáticos de esta historia. ¿Lo eligió por alguna razón especial?
Nací en Irlanda y en mi corazón sigo siendo una chica irlandesa. West Cork es, de hecho, donde escribí el primer borrador. Estaba viviendo en un pequeño cottage con una estupenda vista del estuario mientras cuidaba a mis dos hijos pequeños. Es un lugar que conozco a la perfección, desde el ritmo de las mareas o las líricas voces de la gente que vive allí hasta el edificio que me inspiró para la casa guardacostas.

6. ¿La historia habría sido muy diferente si estuviera ambientada en el presente en lugar de en 1995?
Todo nuestro mundo ha cambiado drásticamente desde que escribí el primer borrador, en especial en la nueva y sofisticada tecnología que Simon tendría a su disposición para ayudarle hoy en día. Además, en lo que respecta al periodismo, con el declive de las ventas de la prensa de papel, en la actualidad Joanna no lo tendría tan fácil para conseguir un trabajo en un periódico de tirada nacional. Ahora trabajaría como freelance o quizá escribiría gratis para algún blog. La tecnología ha revolucionado tanto nuestra vida diaria que damos por sentado todo lo que tenemos ahora. Escribir sobre cómo Joanna usa su contestador automático o el fax resultaba extraño, pero yo recuerdo todavía cuando hacía lo mismo. ¡Aunque mis hijos lo ven muy marciano!

7. En el meollo de la novela subyace un escándalo de la familia real, un tema que también trató en La hermana sombra. ¿Tiene algún interés especial en la familia real británica? ¿El personaje del duque está basado en alguno de sus miembros?
Mientras que La hermana sombra estaba inspirada en la relación histórica entre Eduardo VII y su amante, Alice Keppel, La carta olvidada es ficticia. Cuando estaba escribiendo todavía el primer borrador de La carta olvidada, la muerte de la princesa Diana estaba aún muy reciente en nuestra conciencia cultural. El poder de los tabloides, y ahora de las redes sociales, es enorme y quería explorarlo desde distintos puntos de vista: aquellos que pertenecen a nuestro mundo, como Joanna, y aquellos que son su objetivo, como Zoe. Las tensiones entre amor y deber y cómo los distintos personajes se mueven en esas situaciones para encontrar su felicidad personal es un tema importante en muchos de mis libros. Nada ejemplifica mejor estas situaciones que las realezas de todo el mundo y, habiéndome criado en el Reino Unido, donde la familia real ha sido una constante en los titulares, como escritora sentía el impulso natural de preguntarme: ¿qué pasaría si…?

8. ¿Tiene pensado escribir más libros de este género?
Por el momento me estoy centrando en la serie Las Siete Hermanas aunque es verdad que tengo algunas ideas que quiero explorar más adelante. En realidad he escrito ya otro thriller titulado The Blacksmith, pero descansa todavía en un cajón de mi escritorio. No sé si seré lo suficientemente valiente para dejar que alguien lo lea algún día.

9. ¿En qué otros proyectos está trabajando en la actualidad?
Por ahora la historia de Joanna ha llegado a su fin, pero no descarto darle continuación en un futuro lejano…