Las esferas armilares

Un bello objeto denominado esfera armilar aparece misteriosamente en los jardines de la casa de las hermanas, situada a orillas del lago de Ginebra, y desempeña un papel fundamental en la saga de Las Siete Hermanas.

Se cree que el astrónomo griego Hiparco inventó la esfera armilar en torno al año 200 a.C. para descifrar cómo se movían los cielos y las estrellas alrededor de la Tierra. Su artefacto tenía en el centro una bola que representaba el globo terráqueo y que estaba rodeada por cuatro anillos que se superponían.

A lo largo de los siglos, el diseño de la esfera armilar ha sido modificando para ajustarlo a los nuevos descubrimientos astronómicos. Antes de la llegada de los telescopios a Europa en el siglo XVII, la esfera armilar era el principal instrumento que empleaban todos los astrónomos para determinar las posiciones de los astros.

En la Europa renacentista, la esfera armilar se contó entre los primeros aparatos mecánicos complejos. Muchas figuras de la escena pública se retrataban con una mano posada sobre una esfera armilar, pues representaba el pináculo de la sabiduría y el conocimiento.

Una de las esferas armilares más antiguas que se conservan hoy día data del año 125 y perteneció al astrónomo chino Zhang Heng.

Utilizar una esfera armilar para determinar la posición de las estrellas requiere una destreza considerable, pero su estructura básica es la siguiente: un anillo representa el horizonte y crea la división norte-sur del globo terráqueo. Otro anillo, el meridiano, se sitúa perpendicular al horizonte. Paralelos a esas líneas longitudinal y latitudinal hay otros anillos, y en el centro de los mismo, algo inclinado, está el nómun, una fina varilla metálica. Cuando el nómun se observa de noche, si está correctamente colocado, debería señalar la Estrella Polar.